Castro de Nossa Senhora da Graça

Subiendo al Monte de Nossa Senhora da Graça, encontrará el castro homónimo, un interesante testigo del poblamiento castreño. Para llegar allí, tendrá de pasar por el Lugar da Valinha, en la feligresía de Ceivães. A lo longo del camino hacia la capilla, no deje de fijarse en las varias infraestructuras castreñas.Se trata de una elevación granítica de perfil cónico, localizada a casi 315 metros de altitud, donde es posible atisbar algunos vestigios de ocupación castreña. Mirando con atención, logrará distinguir algunas estructuras circulares y resquicios del típico sistema constructivo de murallas, probablemente ocupados desde el Bronce Final hasta la romanización, entre el siglo V a.C. y el siglo III d.C.. Desde el castro de Nossa Senhora D'Assunção, logrará una excelente panorámica general sobre este castro. Los dos, además, dominaban el curso medio del Río Miño, del cual sacaban gran parte de su subsistencia. ¿Se le ocurre la buena suerte de estos pueblos antiguos, que podían disfrutar continuamente de estas vistas asombrosas?De entre el espolio encontrado en el local, destaca una cantidad de piezas de cerámica indígena, cerámica de tejado (tegula), materiales líticos y piezas en bronce.Sin embargo, su mayor atractivo son las increíbles vistas panorámicas que ofrece, principalmente sobre el Valle de Mouro.